Bugatti Bolide hace su debut público en Le Mans

En el centenario de uno de los eventos de automovilismo más venerados del mundo, la marca de superdeportivos de lujo regresó al Circuito de la Sarthe mostrando el hiperdeportivo al público por primera vez con un piloto legendario y altamente condecorado al volante.

El estimado legado automovilístico de Bugatti está intrínsecamente entrelazado con la historia de las 24 Horas de Le Mans. En el transcurso de 10 décadas, la marca de lujo Molsheim logró momentos inolvidables en el evento del automovilismo. Para celebrar los 100 años de la icónica carrera, Bugatti entregó otro momento mágico a los espectadores.

Sobre el sagrado asfalto en el que se hizo tanta historia, el Bugatti Bolide 1 dio una vuelta a la pista en el Circuito de la Sarthe el sábado por la tarde. Mientras lo hacía, una atmósfera energizante, se abrió paso entre la multitud mientras los espectadores disfrutaban no de uno, sino de dos momentos decisivos: el Bolide presentado en todo su esplendor al público por primera vez y Andy Wallace, ganador de Le Mans en 1988, tomando el volante del hiperdeportivo solo para pista.

Wallace, uno de los mejores pilotos de resistencia del mundo, que fue piloto oficial de Bugatti desde 2011, es parte de un grupo muy selecto de personas que ganaron la Triple Corona de resistencia: las 24 Horas de Le Mans, las 24 Horas de Daytona y las 12 Horas de Sebring.

En el núcleo del Bolide se encuentra el icónico corazón W16 quad turbo de 8.0 litros de Bugatti, hábilmente encerrado dentro de una carrocería de carbono aerodinámicamente optimizado. Para lograr el máximo rendimiento centrado en la pista del Bolide, los frenos son un componente esencial. 

Inspirándose en la tecnología de F1, los expertos de Brembo SpA, un líder mundial con sede en Italia en el campo de la tecnología de frenos para automóviles, crearon un sistema de frenos muy avanzado y personalizado para el Bolide con discos de freno de 390 mm y pinzas únicas (8 pistones en la parte delantera eje y 6 pistones en el eje trasero), asegurando que la potencia de frenado del automóvil pueda dominar sus sobresalientes capacidades dinámicas de conducción.

Texto: Damián Fanelli

Fuente y fotos: Prensa Bugatti