Etapa 13: La Legión Argentina dio la vuelta con el McRae Buggy del Dakar 2011

Pasadas las 15hs. Emiliano Spataro y Juan Manuel Silva cruzaron la meta en Baradero. Fue el premio al esfuerzo, al tesón, al orgullo, a las agallas. Dieron la vuelta a un Dakar corriendo solos adentro de un auto, sin navegante, sin ventanillas ni parabrisas, sin experiencia en GPS o Iritrac. Sus vidas cambiarán de ahora en adelante. Hay un antes y un después, después de correr un Dakar.

Misión cumplida. La Legión Argentina terminó el Dakar Argentina -Chile 2011 con los dos autos que quedaron después del prematuro abandono de Norberto Fontana. La última etapa fue tranquila, lenta y emocionante.

Emiliano Spataro fue el primero en llegar se paró sobre el capot de su McRae y dijo:
“Estoy muy contento. Siento una alegría enorme. Había días que no me podía imaginar como iba a hacer para llegar acá… Y acá estamos, logramos llegar. No se puede creer por donde nos hicieron pasar. Médanos altos, huellas profundas, frío, calor, agua, barro, rocas… y el buggy se la bancó y acá estamos.

Viví momentos inolvidables. Muchas veces tuve que reparar el auto, muchas veces sacarlo de un guadal de arena, de día, de noche. Gracias a los amigos, gracias a los periodistas, gracias a la gente. A todos los que nos ayudaron. Me dieron una mano con lo que fuera necesario, desde una campera hasta ayudar a arreglar el auto.

Rescato el gesto de todos, de los pilotos y de la gente. Era increíble encontrar ayuda de la gente en lugares donde no había nadie. En el medio del desierto mas recóndito y alejado de la civilización. En esos lugares, había una persona que salía de una casita muy humilde y nos daba agua. Porque sabían que veníamos muertos de sed, y muy cansados. Estoy contentísimo y muy sorprendido de lo que es Argentina, de lo que son los argentinos, y de los lugares y la gente que conocí gracias a esta carrera. Estoy muy feliz…”

Juan Manuel silva llegó unos veinte minutos después, y visiblemente emocionado, con la voz quebrada y las lágrimas a flor de piel, hablo con el grupo de periodistas que lo asediaron entre medio del público: “Hay un antes y un después, después de correr un Dakar. Me lo habían dicho y es así, no se porque, pero lloras solo arriba del auto un montón de veces, y pasa eso… sos otra persona después de un Dakar…

Debe ser la exigencia, en lo físico, en lo humano, en sentirte tan solo por ahí tantas veces… esta carrera te cambia la vida. No se de donde sacamos fuerzas. A veces es la vida nos pasan cosas mucho menos grandes y creemos que no las podemos superar, y acá haces cosas que no te imaginas que sos capaz de hacer y seguís adelante.

Formamos un grupo humano excelente. En situaciones difíciles fuimos un gran equipo, fue un grupo humano muy, muy bueno, y la pase bien. Dormía dos o tres horas y me levantaba con pilas… no se de donde sacaba esa energía. Acabo de terminar y ya quiero correr otro Dakar. Muchas gracias y muchos cariños a todos… quiero ver a mi familia…”

Fuente: McRae Pro Dakar buggy 4x2